23.5.07

Desarmando el montaje postbombas (1)

(obra de la artista Raquel Piedrabuena)


En estos días asistimos, con el caso Skanska, de una remanida farsa por parte del sistema, "hacer como que la justicia dilucida hechos de corrupción en el poder".
No por patético este esquema deja de ser una interesante historia, que con los condimentos postmodernos actuales, podría uno suponer, comienzan con aquellos pollos de Mazorín y el impresentable diputado menemista y en ese momento ucedeista, el ex policía Alberto Albamonte, y siguió con las narco valijas de Amira, con revival en esta época K, continuando el Swiftgate, la Ferrari, las coimas del senado, los exámenes de los hijos de De la Rua, …y hasta este último, fácilmente pronosticable, caso Skanska, (no abundo porque un raconto sería interminable).
Esta pantomima, la de actuar como que se persigue la corrupción, tiene varios actores de primerísimo orden, a saber, los funcionarios políticos y judiciales corruptos, los medios y los onanistas periodistas, y los empresarios tan corruptos como los primeros y los segundos.
Desde aquellos podridos pollos húngaros se ha aplicado este parodia, sin solución de continuidad, y lastimosamente también en nuestra propia e impune masacre, la del 3 del noviembre, han logrado que todo vestigio de lucha fuera conducido hacia el "brete" judicial, donde jueces como Luis "el premiado" Martinez y luego Diego "rincón del vago" Estévez, se suponía, iban a "imponer justicia".
Como nunca ocurrió. Porque la justicia penal, como dice el supremo Eugenio Zafaroni, solo persigue a los débiles, nunca a los poderosos.
El hecho, que en nuestras "explosiones de Río Tercero", frase ya con un lugar histórico conceptual, hicieron caer en paracaídas por estas antiguas tierras comechingonas, al inefable "fiscal especial" Carlos Stornelli, un jugador experto en eso "como que la justicia es justicia". Ahora más desenmascarado que nunca, este fiscal federal, amigo de los gobernantes, "mercachifle" de su rol de fiscal, intercambiando acciones judiciales por poder, en fin, el antológico decreto kirchnerista reciente, nos demuestra y descubre cómo son las relaciones entre los representantes de los poderes Republicanos, descubre a este protagonista de la película tribunalicia, que quiere hacer creer que va a enmendar el sufrimiento real de todos los riotercerenses, pero desde la burla.

1 comentario:

maría magdalena gabetta dijo...

Excelente la pintura de Raquel Piedrabuena, una artita que admiro y que forma parte de mi blog. Magda